Familia, amigos, tenemos invernadero!!!! Lo tenemos desde el sabado pero no he tenido ni un minuto para contaroslo. El sabado después de rematar los últimos flecos me fui corriendo porque nos ibamos a Freetown. De camino paramos en Makeni porque teníamos que dejar arroz a la mamy del niño que tenemos en el hospital (el niño de la donación de sangre). Entré yo corriendo para no perder un minuto pero cuando llegó a la habitación me dice que el niño necesita más sangre. Como ibamos con Medo y un lider religioso entré en el coche y les dije que quien de los dos iba a donar la sangre. Como han aprendido a decir aquí todos “los dos, calladitossssssss” y entonces me monté en el coche y le digo a José Luis que nos vamos que ni el dona ni yo (todo como un paripe) pero seguían los dos “calladitossssssss”. Llegamos a la gasolinera de Makeni y el cabreo nos salía a José Luis y a mi por lo poros. Entonces me dice José Luis que dona él y punto y le dije que esperase que iba a hablar con Medo. Lo que le pasaba a Medo es que estaba “acojonadito” y según él es que no tenía nada en el estómago. Pero le dije que eso lo solucionaba rápido, compré unas barras de pan y unas cocacolas y con el chorizo de mi padre que había metido en la bolsa le monté un bocadillo. Llegamos al hospital y el pobre Medito no era capaz de caminar. Le pinchan para ver si era compatible o no y para la desgracia de mi negrito, lo eran. Así que se agarra al enfermero con esos brazos largos y esas manos enormes que tiene y le empiezan a sacar sangre. Acabamos rapidísimo porque la aguja tenía un grosor considerable y nuestro negrito ni se mareó, es que el chorizo de casa hace maravillas. Se le pasó el “acojone” y se pasó todo el viaje llamando a los trabajadores para decirles que no pasa nada y hasta llamó a Foday (el que donó la sangre al principio) para que fuese a ver al niño al día siguiente. No se que pasará al final con el niño pero que para el próximo tenemos donante no me cabe duda.
Joaquín llegaba en la madrugada del lunes y después de la última experiencia con Miguel, le dijimos que cruzase con el helicóptero. Consiste en coger el único helicóptero que hay que te cruza de Lungui a Freetown. El domingo aprovechamos para recoger las pulseras solidarias que todos me vais a comprar. Anda que son solo 3€ y son preciosas. Nos bañamos en la playita y nos fuimos pronto a dormir porque a las 4:30 nos levantábamos para recoger a Joaquin. Allí estuvimos los tres: Medo, Grandpita y yo esperando tres horas y media dormitando en el coche. Y es que la simpatía de Air Morocco le ha hecho llegar a África como buen africano, simplemente con lo puesto. Le han perdido la maleta y para más complicación no es que esté en Casablanca, la han mandado a Gabón. Tuvimos que buscarlo hasta en el mapa porque ni uno lo situaba. Si todos un poquito más abajo y a la derecha, otros a la izquierda pero vamos ninguno nos la jugamos.
El lunes pasamos el día de compras, no de ropita mona sino de las cosas necesarias y para más cuento seguimos sin gas y no hay orden de que vaya a llegar. Después de comer en Roy’s, Joaquin y yo nos bañamos en la playita, Joaquín continua con la moda de ropita interior y yo está vez me lleve el bikini. Recogimos las últimas pulseras que nos faltaban y nos volvimos a casa. Llegamos a las 10 de la noche y aquí estaba toda la comunidad esperando en la puerta. Cenamos algo rápido y nos fuimos a la cama.
Ayer martes, le enseñamos a Joaquin el invernadero y el sitio. La primera toma de contacto. Subí a pedirle un boli a mi xurri y cuando entro en el cuarto me dice que se encuentra mal. Había vomitado por la mañana pero lo habíamos justificado con unas gambas malas que nos habíamos comido en Roy’s, pero ya los escalofrios y el dolor de cabeza no tienen explicación. Como dice él la malaria es su regla porque le viene cada tres meses y no falla la condenada. Yo en broma le digo que ya no sabía que inventarse para no venir a montar en bici. Es que le dije: “de mañana no pasa y empezamos un régimen para que pierdas unos kilitos”. Los kilitos los perderá pero creo que de la bici nos olvidamos.
Y ayer en la cena tuvimos una sobremesa de lo más divertida. Vino Joseph a cenar y como José Luis estaba con malaria empezamos a hablar de la enfermedad. Nos dimos cuenta que cada uno tiene su método y no tengo tan claro que sean aprobados por los médicos que lean el blog:
- Método Joseph: “Plan Bush” bombardeo total y luego preguntas quien es el enemigo. En cuanto tiene un mínimo síntoma empieza con las pastillas antipalúdicas que si no son suficientemente dañinas para el higado las mezcla con un coctel de neurofren cada tres horas. “bombardeo, bombardeo, bombardeo y muerte asegurada”
- Método Manuel: “plan Lazaro y resucito a los 3 días”. Contado por Joseph tiene mucha más gracia. La última malaria estaba Joseph con él y creo que Manuel empezó, me va a entrar malaria así que antes de vomitar me voy a comer lo que me apetece y empezó a desayunar como Dios manda para vomitar sustancia. Y mientras comía Joseph le miraba alucinando. Manuel es una persona perfeccionista y cuadriculada y creo que hasta enfermo empezó voy a acabar de desayunar, luego firmaré los papeles que necesitas, apagaré el ordenador y me meteré en la cama. Y es que cuando Manuel tiene malaria se encierra en su cuarto y no sale hasta que han pasado tres días. Nos confesó que era porque las pastillas le marea, José Luis le miró extrañado porque las pastillas no marean pero es que Manuel en vez de tomarse una por la mañana y otra por la noche se las toma cada 4 horas. Nos reíamos porque nos decía que se pone la alarma para tomarse la pastilla porque está tan mareado que no se puede ni mover. Pero a los tres días resucita.
- Método del peregrino- abogado como le llama José Luis a Coco: “ plan monjitas del Gluni” tomarse una pastilla de no se sabe que, cada día en plan prevención. En este caso no tenemos claro que es mejor si el remedio o la enfermedad. Ahora está con fiebre y dolor de garganta, no sabemos si es malaria o un constipado así que ya se verá
- Método de José Luis, denominado por Joseph “plan martir”. Que consiste en cumplir las normas, tomarse las pastillas dos veces al día y no hasta que no estes seguro que es el “cabrón del mosquito”. Joseph nos explicaba que el de Grandpa era pagar por cada pecado en cada vomitona
Os voy a dejar que voy a subir a ver como está jose luis que le oigo vomitar desde aquí. Un besito muy fuerte
Esta noche os cuelgo fotos
miércoles, 8 de octubre de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Irene:
Que maravilla el invernadero!
Eso de la malaria da un poco de yu-yu. Tu ten cuidado, que lo importante es estar buena para seguir haciendo cosas y poder cuidar de los malitos. Toma precauciones pues es importante no tomarlo a chiste.
Nuestros mejores deseos para ti, y para los malitos que se recuperen rapido. besos
A ver si llega, pues despues de escribir a veces no consigo llegar a enviarlo.
sayooo!!
por fin tu nene acabado ;) me alegro mucho!! y he visto tus pikines ohhh si parecen pollos de verdad, tienen tamaño estandar y todo!jeje
joo, pobre Grandpa, dile k se mejore de mi parte , y para Coco lo mismo... estos hombres que debiles son ;) jeje
pues nada, ya "en breve" nos vemos y nos cuentas tus aventuras, con Yamasa y todo... no me lo creo todavia!!
muchos muchos besos y saludos para todos :)
adama
Publicar un comentario