Ya hemos empezado a recibir las primeras noticias de Irene en Sierra Leona. Ha llegado a la misión y se ha encontrado con una habitación estupenda para ella sola. (Seguro que es una deferencia que tiene con ella Jose Luis, que no deja de festejar en su blog la forma de ser de Irene y su capacidad de movilizar a otros). No se si ya habrá tenido ocasión de ver alguna de las gallinas que viene a redimir, pero imagino que en cuanto vea una nos mandará un foto ilustrativa.

En Madrid tenemos poca novedades relevantes. Beatriz ya se ha instalado en Collado con Uro, y se ha llevado el Canal + sin preguntar. Ya ha instalado el router wi-fi que nos va a permitir conectarnos al blog y hablar por Skype con Irene, siempre que esté conectada. A Borja, el vecino de arriba, le han entrado a robar en su casa en estos días con lo que andamos con la llave echada todo el rato, aunque estemos dentro de la casa. El estaba fuera en el estudio y se habia llevado a Nana. No se que hubiera pasado si la hubiera dejado dentro de la casa. A lo mejor la habrian robado los propios ladrones, porque es una perra la mar de simpática a pesar de la cara de fiera que tiene. Maria Antonia ha insistido en regalarte las toallas mágicas que te acompañó a comprar a De Viaje. Asi que no solo te acompañó en su momento, sino que además el favor le ha costado dinero!!!! Eso son buenas amigas y lo demás tonterias.

El testamento de la Madrina sigue dando guerra. Definitivamente hay que protocolizarlo en un juez, lo que llevará meses. De esta manera pondremos nuestro granito de arena para que la Justicia siga completamente colapsada. Creo que de esta experiencia he aprendido un montón de cosas. La primera es que un testamento ológrafo no vale para nada. Lo suyo es hacer el testamento delante de un notario y quitarle un montón de trabajo a los herederos. La segunda que los bancos son unos hipocritas, mientras ellos no se den por enterados de que alguien ha fallecido no hay problemas para operar desde las cuentas del fallecido, si se tienen poderes para hacerlo. Una vez que se oficializa el fallecimiento, los bancos se pasan al extremo contrario y son más papistas que el Papa. Pues no me dijeron el otro día que como podían ellos saber si la Madrina tenia hijos, que les llevara el Libro de Familia. Asi de bien conocen a sus clientes que les han sido fieles hasta los 97 años y se han muerto teniendo acciones de su entidad. Con amigos como esos, ¿Para que necesitas enemigos?